Turismo Espacial: Un espacio para ingeneiros y emprendedores

El 1 de octubre se celebró la jornada «Turismo Espacial: Un espacio para ingenieros y emprendedores», que pretendió analizar las cuestiones concernientes a la viabilidad técnica y económica del proyecto internacional SRV de Booster para el transporte de pasajeros, en la que participa la empresa española Deimos Space.

El pasado año 2011 la NASA decidió retirar el Transbordador Espacial, un vehículo parcialmente reutilizable concebido para misiones tripuladas de vuelos orbitales. El Space Transportation System (STS) consistía en dos cohetes lanzadores, un tanque externo y el vehículo orbitador reutilizable que efectuaba la reentrada y aterrizaba como un avión. Realizó 135 misiones desde el año 1981. Entre las más memorables están el lanzamiento del telescopio espacial Hubble, que tanta información está aportando sobre el universo, el envío de sondas interplanetarias, el lanzamiento de satélites de órbita baja, la realización de experimentos espaciales y, el apoyo a la Estación Espacial Internacional. Se construyeron cinco transbordadores, dos de los cuales se perdieron en trágicos accidentes. La conclusión es, sin duda, que los transbordadores espaciales son vehículos técnicamente viables que han prestado servicio durante 30 años, con lo que esto supone de madurez para las tecnologías empleadas.

El emprendedor y aventurero Richard Branson presentó el 7 de Diciembre del 2009 su SpaceShipTwo en el desierto de Mojave. El proyecto de Suborbital Reusable Vehicle (SRV) de Virgin Galactic transportará, como iniciativa privada, pasajeros en vuelos suborbitales (Turismo Espacial), además de servir para otras misiones como el lanzamiento de pequeños satélites, laboratorio de ciencias espaciales, etc. Es decir, se trata de acercar el espacio a los ciudadanos «corrientes», desde la óptica de una empresa privada, que se deberá “sostener” de acuerdo a las leyes del mercado de la oferta y la demanda. El reto, tratándose de servicios tan sensibles a la seguridad, no es nimio. Elegir vuelos suborbitales, permite reducir, en esta primera fase, la gestión de la energía para poner cargas en órbita, con un coste y complejidad técnicamente abordables para las empresas privadas.

Está fuera de toda duda, que a la mayoría de nosotros nos gustaría viajar al espacio, disfrutar de otras vistas de la tierra, viajar más rápido, como turistas espaciales, o, por qué no, como emprendedores para desarrollar nuevos negocios en el ámbito espacial. Otro tema es, cuándo alcanzarán dichos vuelos suborbitales una seguridad, equiparable al exigente transporte aéreo a un precio que sea asequible al ciudadano medio.

En 1903 los Hermanos Wright, fabricantes de bicicletas , realizaron el primer vuelo en avión. Tuvieron que pasar treinta años para que se diseñara, fabricara y operara el avión comercial Douglas DC-3, el más exitoso de la historia de la aviación. Este avión no solo se “sostenía” en el aire, sino que también, y esta es su mayor aportación, era «sostenible» económicamente como sistema de transporte comercial.

A los 30 años del primer vuelo del Transbordador, ¿estaremos en el momento del despegue en la explotación de los primeros vuelos comerciales?

FUENTE: Instituto de la Ingeniería de España

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